Presentamos sugerencias interactivas entre Literatura y Cine, y desde el cine que procede de la literatura para ofrecer y tratar temas que importen desde miradas ubicuas. Para aprender a ver cine y mejorar la lectura y así acceder a conocimientos culturales a partir de unidades didácticas. Te animo a participar, a compartir, porque enfrentarse a una secuencia de cine comparativamente no es tarea fácil y son necesarias muchas miradas para poder llegar a alguna conclusión.
El relato de Anna muestra a una niña alemana, a partir de los recuerdos desde su adolescencia entre la primavera de 1933, con nueve años y pocos días antes de las elecciones Federales alemanas convocadas el 5 de marzo para la elección del VIII Reichstag (1933-1937) y de los años que siguieron, en los que ella, su hermano Max y sus padres, que no reciben nombre propio en todo el relato, se verían obligados a ser refugiados y emigrantes por diversos países por ser judíos; desde Berlín, el lugar donde vivían; primero se fueron a Suiza, luego a Francia y posteriormente al Reino Unido, en donde permanecieron el resto del tiempo. Se hace una presentación ingenua pero inteligente, desde una perspectiva infantil aunque siempre en tercera persona, de lo ocurrido en ese tiempo, mostrando los dolores, las penurias sufridas y el desconcierto que les supuso, a ella y a su familia, sin que entendiera, como niña, qué era lo que pasaba, ni cuál era la causa que les castigaba a tal situación, únicamente porque había llegado el nazismo al poder. Este es el contenido de la novela juvenil de Judith Kerr -de carácter autobiográfico-, 'Hitler robó el conejo rosa' ('When Hitler Stole Pink Rabbit'), publicada por primera vez en 1973 y llevada al cine como 'El año que dejamos de jugar' (2019) dirigida por Caroline Link; que, en su versión original, mantiene el título de la novela y con una adaptación fiel a la obra de Kerr. Es la primera novela de una serie, 'Bombs on Aunt Dainty' 1975 ('En la batalla de Inglaterra') y 'A Small Person Far Away' (1978). Juntas forman la trilogía 'Out of Hitler Time' y muestran el largo recorrido y las situaciones vividas por Anna desde los nueve años, cuando todavía es feliz en Berlín; y de todo su periplo posterior como fugitiva; con sus padres y hermano. Precisa que los funestos días iniciales de la huida fueron los previos a ganar Hitler la elecciones, en marzo de 1933 y todavía años antes de que estallara la Segunda Guerra Mundial (1939-1945) en los que tuvieron que huir de un nazismo que los perseguía por el mero hecho de ser judíos; en la tercera obra, muestra su época de adulta en 1956 ya casada y con una vuelta a Berlín occidental, para ayudar a su madre que había tenido un intento de suicidio.
Judith Kerr (1923-2019) es una de las autoras para niños más importantes del Reino Unido. En 2012 se le entregó la distinción OBE (Orden del Imperio Británico) como reconocimiento por sus servicios a la literatura infantil ya la educación sobre el holocausto. Esta narración de Kerr, como el resto de su producción, ha sido escrita en inglés, su tercera lengua después del alemán su lengua materna y el francés (esto si no contamos el dialecto suizo que aprendió durante su estancia en ese país), pero no deja de ser la escritura de una persona perteneciente a una diáspora: en este caso, de refugiada judía alemana disidente del régimen nazi.
La historia empieza a finales del invierno de 1933, con Anna de 9 años; es feliz. Ella y su familia son de clase media acomodada, su padre es escritor conocido y de prestigio, crítico con las situaciones que se están produciendo, por lo que es querido y admirado por muchos, aunque no deja de tener muchos adversarios. Su madre está por ella y por su hermano Max, mayor que ella; con el que juega y se pelea al cincuenta por ciento. La niña quiere a sus amigas y está satisfecha de ir al colegio que va. Es una época en la que se hablan de las futuras elecciones muy mediatizadas por las imágenes envolventes de los nazis que aspiran a consolidarse, con la aceptación entusiasta de muchos jóvenes, fascinados por la nueva estética de uniformes, banderas con la esvástica y que se mueven a pies juntillas al son de himnos y pasos militares. Entre el grupo de amigos de los adultos, no todos tienen un pensamiento liberal, aunque las diferencias se irán descubriendo poco a poco.
La situación presentada en la novela ha de enmarcarse en el ambiente histórico que vivía Alemania como consecuencia de la depresión sufrida por la pérdida de la Primera Guerra Mundial en 1919 y por las fuertes medidas compensatorias que se exigieron al país, lo que provocó una reacción nacionalista en la población que no comprendía ni admitía el resultado de la derrota. Se formó el "Partido Obrero Alemán" (Deutsche Arbeiter Partei, DAP) más tarde llamado "Partido Nacionalsocialista Obrero Alemán", conocido como Partido Nazi, en el que ingresó Adolf Hitler, para desempeñar el cargo de jefe de propaganda. El partido se caracterizaba por su rotundo rechazo a la rendición de Alemania.
El régimen que se había establecido tras el final de la Primera Guerra Mundial, fue la llamada República de Weimar (1918-1933) que tuvo que enfrentarse a graves problemas económicos, sociales y políticos, con levantamientos de distintos sectores, y gran dificultad para establecer su autoridad. Hubieron varios intentos de golpe de Estado por el Partido Nazi, en noviembre de 1923, liderado por Adolf Hitler, que fracasó y fue condenado a cinco años de cárcel, aunque sería liberado después de 10 meses; tiempo que aprovechó para escribir su libro "Mi Lucha" (Mein Kampf) donde presentaba su plataforma ideológica con la cual Partido Nazi crecería durante la década de 1920, y llegaba al poder en 1933.
Las preocupaciones por lo que pueda ocurrir a la familia llegan antes de los comicios de marzo de marzo de 1933. El ambiente caldeado ya presagiaba que si gananban los nazis la vida para la familia podía ser difícil o mucho más. El aviso más rotundo y que les impulsa a tomar decisiones se produce pocos días antes, a finales de febrero. El padre es es avisado por un policía amigo; le dice que le quieren quitar el pasaporte. Está con gripe en cama, pero deciden, junto a su madre que ha de huir de Alemania de forma urgente. Al día siguiente lo hace al amanecer; se va en tren, camino de Praga y de allí a Suiza. A la dificultad de tener que escapar de esa manera se une la necesidad de hacerlo con todo sigilo, de manera que ni amigos, ni conocidos han de saber que su padre se ha marchado, ni que ellos se piensan ir también, de forma inminente. Su madre explica a Anna y a Alex, de la mejor manera posible, las razones de tal escapada y les dice que en menos de una semana se encontrarán con su padre en Zurich porque ellos también se han de ir de Alemania.
A Alex no le gusta la idea. Es más mayor y sus relaciones con los amigos están más consolidadas, Siente que todo lo suyo está en Berlín y no quiere dejarlo. Para Anna es un poco distinto; siente tristeza por lo que deja, pero todo lo que imagina es una aventura, que le emociona porque la manera en cómo lo recibe, carece de connotaciones negativas y el viaje parece más bien de unas vacaciones que de una huída. El problema está en la selección de lo que han de llevarse y de lo que no pueden hacerlo. En la casa se queda el 'Conejo Rosa' que ella tanto quiere y que se le menciona en el título de la obra; además de tener que abandonar la escuela, las amigas y a Heimpi, la señora que les ha cuidado desde que nacieron y a la que quieren como a alguien muy cercano de la familia.
Todo queda atrás, en principio, Anna y Max creen que será por muy pocos días. Las despedidas son las mínimas y a hurtadillas. Después de muchas horas de viaje, llegan a Stuttgart donde han de hacer noche y cambio de tren hasta la frontera. Este viaje también tiene sus riesgos porque todavía circulan por Alemania y si son buscados, como se temen, la identificación en el tren puede ser un peligro. Otro largo trayecto y ya están en Suiza. Llegan a Zurich y en la estación se encuentran con su padre. Emocionante para todos. Es el día de las votaciones. Se instalan en un buen hotel y su padre les promete una visita turística a la ciudad de Zurich al día siguiente.
Teleférico y Trasbordador-Zurich-Suiza-Producciones Vicari.(Juan Franco Lazzarini)
La visita es larga y muy interesante, paseo por las calles, con el transbordador; subida al teleférico contemplando las bellas panorámicas de la ciudad. Pero Anna es pequeña y a pesar de su interés, la salud se le quiebra; enferma y pasa casi un mes semiinconsciente, en un estado febril y con alucinaciones. Su vuelta a la realidad, que ha tardado mucho, hace que sus padres vean necesario abandonar el hotel para ir a un alojamiento más modesto porque la situación laboral del padre ha empeorado por ser conocido por sus escritos y temido por ello mismo en las revistas y diarios suizos, que son neutrales y no quieren comprometerse. Por otra parte, al ganar las elecciones, Hitler está tomando caprichosa posesión de todo aquello que le resulta incómodo. En Berlín, han asaltado domicilios, entre los que está su casa y les han robado todo lo que tenían en su interior. Se trasladan a Gasthof Zwirn, lugar rústico cercano a la ciudad que les permitirá vivir de forma más modesta, en un entorno natural.
Herr Zwirn es el propietario del hostal donde se alojan. Tenía tres hijos -Franz, Wrenell y Trudi- con los que Anna y Alex juegan y pronto se adaptan a la nueva situación con los otros niños del pueblo. Después de las vacaciones, en los que descalzos juguetean y corren todos juntos, han de ir a un colegio del pueblo o cercano. Max, como es mayor, ha de ir al instituto a Zurich. Todo requiere cierto cambio de hábitos y normas. La lengua tiene variantes dialectales que les cuesta entender, las maneras de comportarse del lugar, difieren de las suyas: Aquí la relación es de los niños con los niños y las niñas con las niñas; en el colegio y en los juegos. El estudio también se hace de otra manera. Poco a poco, se adaptan y van entendiendo las maneras y formas. Un día llega a verles tío Julius, un naturalista que va a un congreso a Italia y aprovecha la escapada para ir a verles, con peligro de ser descubierto y castigado por ello. Les trae nuevas noticias de Berlín y no son nada alentadoras. Los nazis han vaciado las casas, quemado los libros y arrestado a personas sospechosas, por considerarlas enemigas de la causa y disidentes del pensamiento imperante. Otros habían conseguido huir hacia otros países... También, algunos habían cambiado su pensamiento anterior por el nuevo. Todo bastante catastrófico. Finaliza el curso, Anna cumple los diez años en junio. Su padre sigue sin poder publicar, apenas; los editores tiene miedo que vean su nombre en los periódicos del país. Planean un cambio de lugar para poder mejorar la situación económica. París, en Francia, puede ser un acierto. Allí se encuentran muchos refugiados intelectuales alemanes que ya han fundado un periódico 'El Diario Parisino' en el que ya ha publicado algunos artículos y el director quiere que lo haga más frecuentemente. Lo hablan con los niños. La fascinación por la aventura que supone conocer un lugar nuevo, vuelve a entusiasmar a Anna y no tanto a Max, a pesar de que les inquieta el cambio de idioma que desconocen por completo. Pero la situación es cada vez más inquietante. Han puesto precio a la cabeza de su padre:'Mil marcos alemanes'. No hay más remedio que marchar de allí, porque ya empiezan a ser conocidos. Nuevos retos y nueva situación de refugiados en otro país extranjero. Llegan a París en octubre. Consiguen alojarse en un pequeño domicilio de escasas condiciones y del que el pago semanal del alquiler, les supone una verdadera preocupación por las dificultades económicas que tienen.También tienen que adaptarse a la mala cocinera que es la madre por no haberlo hecho antes, nunca. Todos intentan hacer el cambio de la manera más cordial. A los niños exaltan la belleza de la ciudad y hacen una visita turística, nada más llegar, por los lugares más emblemáticos.
Empezar a situarse significaba enfrentarse con una nueva casa, nuevo barrio, nuevas gentes, extraños para todo el mundo y con una lengua y un vocabulario desconocido para comunicarse en las situaciones habituales "oui", "non", merci", "baguette", "madame", monsieur", bonjour", "un crayón", etc., etc. Tienen una profesora de francés que les va a ayudar a aprender lo imprescindible para poderse manejar; pero, los temores ante lo desconocido son muchos. Pasada la Navidad, Max empieza a ir a un "lycée" de enseñanza media. Se siente ridículo con la ropa que lleva porque no sigue la norma de sus compañeros. Anna no puede acceder a ningun colegio público por falta de plazas y ha de seguir en casa, hasta que, gracias a unos amigos consigue entrar, poco después, en una "école communale" de niñas. Allí se va integrando gracias a la profesora que le anima destacando sus éxitos. A Colette, una compañera de clase, la profesora le pide que haga de tutora y así, pueda seguir lo que se hacen sin grandes dificultades. También influye para su integración la buena disposición del resto de las compañeras de clase. Anna sigue como una autómata escuchando sin entender, escribiendo sin saber qué pone. Se guía solo por el sonido de las palabras que oye en los dictados, averiguando su transcripción ortográfica, que dista mucho de la que se corresponde con la norma. Disfruta cuando se trata de hacer cálculos matemáticos porque los número sí que los entiende y, además, es muy buena haciendo las cuentas. Otra cosa es cuando ha de resolver problemas porque no entiende el significado del texto del planteamiento.
Pasa el tiempo y van aprendiendo, con más rapidez de la que habían imaginado; y, la integración es pronto y casi total, eso sí, gracias, igualmente, al esfuerzo y buena disposición de los niños. Sin embargo, en el ámbito familiar la situación económica no mejora y en la social los problemas también crecen. A su padre le pagan mucho menos de lo que necesitan y no tienen ni para lo más imprescindible. Necesitan ropas nuevas porque en el tiempo pasado desde que salieron de Alemania, los niños han crecido y ya no les cabe la que tienen. Suerte de algunos amigos, los Fernand, que les facilitan algunas piezas que nunca hubieran pensado que admitirían, o ni siquiera que las hubieran precisado; les ofrecen una gran amistad. Pasa el curso, llegan las vacaciones y el verano. Vuelven a pasar unos días en Gasthof Zwirn, primero con la sorpresa de sentirse distintos al año anterior, luego ya al final de las vacaciones, lamentando tener que volver a París.
Así van avanzando, con una relación compleja con el mundo y también entre ellos; de mayor acritud por los nervios que van almacenado en vista de que nada mejora y más bien, todo va a peor. Lo sortean tan bien como pueden, aunque con frecuentes riñas porque su madre está sugiriendo constantemente que estarían mejor en Inglaterra, que ella conocía y por la que tenía un gran afecto.
El curso continúa y es el momento en que Anna obtenga "certificat d'études" de Educación Primaria; tiene doce años y con gran esfuerzo y dedicación lo consigue. Acaba el curso. A raíz de cómo está estudiando la historia de Napoleón, en la que solo importan fechas, batallas y triunfos, su padre se inspira y empieza a escribir un guion de cine en el entorno de la infancia del militar y estadista que, después de circular por manos de varias productoras que deniegan su apoyo para llevar a cabo la película, es admitido por una productora húngara con sede en Inglaterra. Es la ocasión para cambiar de domicilio y no lo dudan. Otro viaje, otro país, otro idioma, otras amistades, otros colegios... Es el verano del año 1935. ¡Tan poco tiempo el pasado y tantos cambios! Sin oportunidad alguna para volver a casa, a Berlín, porque la situación empeora por momentos y cada vez las noticias que llegan son peores. Tío Julius había sido despedido del trabajo que desempeñaba en la ciudad como naturalista; no puede ni acercarse al zoo que tanto amaba y su falta de oportunidades le lleva al suicidio.
Termina esta primera obra de la trilogía con el viaje a Londres: París - Dieppe en tren; cruce en barco del canal de la Mancha, con mala mar y una travesía con una duración entre grandes olas de más de seis horas; llegada a Newhaven; nuevamente viajan en tren hasta llegar a Londres con otro largo recorrido. A partir de ahí, nueva aventura vital incorporando elementos que ahora no sospechan.
La película
La novela autobiográfica de Judith Kerr ha sido llevada a la pantalla por la directora Caroline Link de forma respetuosa por lo que cuenta y por la manera de hacerlo. Se trata de un historia tristísima y tremenda en la que siempre se ve un rayo de esperanza; la luz de la mirada de una niña que confía en el futuro y no prevé nunca que, lo que sus padres proponen, pueda salir mal. Esta mirada limpia hace que suframos desde fuera por lo que le puede esperar en la situación en que viven. Max ya ve las cosas de otra manera, es un poco mayor y ha dejado de tener la extrema candidez e Anna.
La directora guionista y directora de producciones de televisión, documental y ficción, en colaboración con Anna Brüggemann representa una novela que habla de la pérdida de la inocencia de una niña que deja su casa y el Berlín de los años treinta, para iniciar un periplo con dos años de cambios y nuevas adaptaciones constantes, el idioma, las costumbres, y las dificultades económicas, en una familia. En la película su padre tiene nombre propio, Arthur Kemper. Hombre culto y reputado en Alemania, y ahora reducido a refugiado. Dorothea, la madre; también con nombre, y Max, su hermano mayor. Juntos, dan tumbos como migrantes que intentan sobrevivir, sin tener nada, siendo mal vistos y luchando por seguir adelante, en dos largos años difíciles, con algunas alegrías que podrán parecernos obviedades, pero que en sus circunstancias son de vital importancia.
La interpretación de los personajes es de gran delicadeza, por parte de los adultos: imprimen un ambiente en cierta manera confortable dentro de la tragedia que están viviendo, por el amor que transpiran de unos a otros, padre y madre y con los hijos, Max y Anna. Esto hace que todavía se subraye más su inocencia de todo cuanto se les pueda acusar. Entre todos, destaca la actuación de Anna representada por Riva Krymalowsky que brilla con luz propia a pesar de su corta edad.
Es un relato que contiene muchas lecturas, desde la infantil a modo de aventuras vitales posibles, que luego tienen contratiempos; pero suavizados gracias a unos padres amorosos, que intentan mejorar la realidad tanto como pueden, para protegerlos de todo, hasta de lo que realmente les acecha: La huida del mal que les persigue sin ninguna justificación.
La película 'El año que dejamos de jugar' contiene todo aquello que puede encandilar: Amor, pasión, belleza, fotografía, música, suspense, vestuario y grandes interpretaciones de todos los personajes que aparecen en la pantalla. Aunque sabemos que es una pantalla que esconde una gran tragedia. Y no podemos quedarnos en la historia pasada. Es una situación que presenta los años treinta del siglo pasado pero que está ocurriendo ahora en numerosos países en los que es imposible seguir ni siquiera, malviviendo y no lo podemos obviar.
Tenemos el informe de ACNUR en el que se muestra que 82,4 millones de personas viven forzosamente lejos de su hogar por guerras, violencia y graves violaciones de sus derechos fundamentales. Esto supone más del 1% de la población mundial; es el número más alto jamás registrado por ACNUR. Cifras que hablan por sí solas sobre la situación de los refugiados.
Mostramos aquí los diez principales países de origen de las personas refugiadas y desplazadas en el extranjero, con la evolución desde el año 2003 al 2020.
Puede verse la película 'El año que dejamos de jugar' en Movistar +
Sugerencias didácticas
Una serie de actividades didácticas permitirán una mejor interpretación del mensaje.
Veamos:
Ver la película y leer la novela para relacionarla en las secuencias correspondientes.
Reconocer la época histórica que se relata. Años treinta del siglo XX.
Comprensión de términos como Nacionalsindicalismo, nazismo, fascismo, etc.
Identificar los lugares geográficos en el que se desarrollan los hechos.
¿Qué lenguas saben Anna y Max y cuáles se ven obligados a aprender? Enuméralas y busca palabras en alguna de ellas.
Se puede comparar el relato literario con la película para comprobar si se corresponden: lugares, tiempos históricos, características de los personajes.
Cuando no sea así, se verán las diferencias y se elegirá la forma que presentación considerada mejor, nos ha impresionado más, etc.
Identificar lo que hay de nuevo en la película que no esté en la base literaria.
Aproximarse a Judith Kerr y a su obra.
Acercamiento a las obras 'Bombs on Aunt Dainty' 1975 ('En la batalla de Inglaterra') y 'A Small Person Far Away' (1978) que forman parte de la trilogía para ver cómo continúa la historia de esta familia, que ahora termina en el momento que llegan a Inglaterra.
Evaluar los elementos éticos de la historia. ¿Cómo se comportan los personajes secundarios que acompañan o desprecian a esta familia? Pueden clasificarse y caracterizarlos.
¿Puede compararse esta historia con otras de obligado desarraigo que conozcamos, más recientes?
Qué elementos de la historia invitan al desarrollo de la imaginación y la creatividad. para sugerir maneras de resolver problemas ¿El espacio? ¿El tiempo? ¿La actuación de los personajes?