viernes, 11 de marzo de 2022

'LA FUNDACIÓN' DE ANTONIO BUERO VALLEJO EN ADAPTACIÓN DE TVE DIRIGIDA POR JOSÉ OSUNA (1977)

Vamos a centrarnos en la obra de teatro 'La Fundación', estrenada en 1974. Una alegoría sobre la libertad, las diversas formas de criticar su negación y la lucha por conseguirla como forma  de rebelarnos contra la esclavitud.   

Autorretrato del dramaturgo Antonio Buero Vallejo realizado en 1947.

Su autor, Antonio Buero Vallejo (Guadalajara,1916-Madrid, 2000), figura, junto a García Lorca y Valle-Inclán como uno de los mejores autores dramáticos españoles. Entre su primera obra, 'Historia de una escalera' que publicó en 1949 y con la que se dio a conocer y la última, 'Misión al pueblo desierto' presentada 1999, transcurren cincuenta años de estrenos y de éxito por el impacto positivo, tanto social, como estético. Su obra le hace acreedor de un gran prestigio; la crítica le califica como el dramaturgo más importante de la segunda mitad del siglo XX; tiene el mérito de ser el único autor de teatro galardonado con el Premio Cervantes (1986) y el primero que obtuvo el Premio Nacional de las Letras Españolas (1996), entre otras muchas distinciones. Fue encarcelado durante la Guerra Civil y condenado a pena de muerte,  conmutada después, Aunque siguió en prisión compartida con Miguel HernándezEscribe teatro social en el que defiende la libertad humana. Intenta burlar la censura y escribir obras que no se le prohibieran.    

Su evolución literaria se  caracteriza por tener tres ciclos: 

  • Obras críticas con la sociedad española contemporánea de la época como 'Historia de una escalera'
  • Obras críticas con la historia de España como 'Un soñador para un pueblo' relacionada con el Motín de Esquilache.
  • Obras simbólicas como 'La Fundación'   

Normalmente, presentamos obras ubicadas en un espacio concreto que puede ser identificado geográficamente y en el tiempo, con bastante facilidad; sino al principio, sí a lo largo de la obra. También, la mayoría de las veces tratamos películas, que provienen, en general, de novelas. Aquí no es ni lo uno ni lo otro. 

'La Fundación' está considerada una obra de lectura obligatoria para las pruebas de selectividad a entrada a la Universidad, y seleccionada para ello, durante varios años, en España.  

Síntesis de la obra

Es una obra teatral compleja que requiere una lectura o un visionado de su representación atento, para entender los matices que encierra. De entrada su estructura y manera de empezar nos puede desorientar por una falta de detalles que nos ayude a situarnos, en el espacio y en el tiempo. Posteriormente, se van hilando cabos y se llega a una interpretación de la realidad representada.

El comienzo es de una situación 'in media res' porque entramos en un relato ya empezado, sin que se nos diga qué ha pasado antes en ningún momento y nos faltan datos de procedencia para poder seguir la trama, que además, como veremos, tiene carácter circular porque termina como ha empezado. Inicialmente, los personajes parece que no saben bien dónde están, ni lo que está pasando y a lo largo del tiempo que transcurre, de cuatro días, Tomás, que en cierta manera protagoniza los hechos, se va dando cuenta de sus ensoñaciones y los personajes que le acompañan le ayudan a ir desvelando la realidad de su situación. También nosotros descubrimos la realidad en la que están inmersos. La obra tiene una estructura dividida en dos partes, subdivididas a su vez, en dos actos. En la primera parte nos encontramos con cinco personas que están compartiendo espacio y hablando con frases poco comprensibles, en una  aparente 'Fundación'. Un lugar maloliente y con deficiencia de servicios. En la estancia hay un grupo que tiene una apariencia que camufla su verdadera identidad. Todos representan algo ajeno a su realidad; están investidos de acuerdo a su percepción irreal de ese entorno.

  • Tomás tiene mucha relevancia porque es el que hace actuar al resto del conjunto.  De Tomás se dice que es novelista; es el que tiene alucinaciones; conversa con Berta, una novia inexistente, o por lo menos ausente de aquel entorno; quiere escribir su novela. Tomás es un personaje contemplativo. Representa al intelectual poco comprometido. Su actitud es amable, agradece ser bien tratado. Es un personaje redondo que recupera el juicio al final. 
  • Tulio es fotógrafo, quiere trabajar sobre holografías. Dice que tiene una novia en el extranjero estudiando con una beca.Trabajan juntos en hologramas. Es huraño y contrario a la opinión los demás. Primero sigue a Tomás. Luego se desmarca.
  • Asel  dice que es médico acupuntor; que investiga sobre el efecto de las microcorrientes de la piel para resolver enfermedades; luego parece que es ingeniero. Tiene apariencia de ser el mayor y más maduro de todos. Asel miente para conseguir sus objetivos, objetivos positivos y tópicos. Descubre que el hombre postrado en la cama está muerto y se lo calla.
  • Lino muestra una gran imaginación. Lo presentan como ingeniero, pero es tornero. Tiene unos principios éticos que le guían. Primero es apático, pero luego se vuelve activo. 
  • Max, aparentemente matemático, en realidad, tenedor de libros.  No está bien visto por sus acompañantes por ser considerado el soplón de la policía del que no se pueden fiar. Es un personaje sin escrúpulos.
  • Berta es la novia imaginaria de Tomás; tiene un papel cercano al desdoblamiento de la personalidad del novio; lleva un ratón en las manos que es el alterego de Tomás porque  está una la jaula,  y en La Fundación', para experimentar con él. Hasta Berta lo llama igual: 'Tomasín", para enfado de Tomás. Nadie entre los compañeros de Tomás cree que la chica sea real, pero le siguen la corriente. Su ratón es una metáfora de la ratonera en la que se encuentran los personajes de la obra. 
  • En la escena, hay, además, otra persona que está en una cama, que habla en escasas ocasiones; da la impresión de estar durmiendo; ni come ni bebe. Finalmente, descubren, o nos descubren, que está muerto, lleva así,  seis días. 

Todos debaten, comentan discuten sobre el lugar en el que se encuentran. Siguen a Tomás que toma las iniciativas de las conversaciones; tiene una apariencia un tanto ilusa porque cuando habla no conecta con la realidad, es un visionario (a modo de comparación, como D. Quijote, que en vez de ver molinos de viento, ve gigantes). Es el que activa los temas que tratan. Todos le siguen inducidos por Asel, que considera que hablar es un bien para Tomás. Poco a poco, Tomás se acerca a comentarios más fiables con el entorno en el que se mueven realmente después de varias crisis visionarias. Ocurre cuando se llevan de la estancia-celda en donde están a Tulio y descubren que es para ejecutarlo. Este giro de la obra la hace más realista y clarificadora. Es en el segundo acto de esta primera parte cuando empieza a descubrirse que están en la cárcel y comprueban que Max ha sido un soplón de la policía, para tener beneficios propios durante el tiempo que estuviera en la prisión. Sus compañeros le hacen un interrogatorio en el que le afean de haber sido un chivato. En un arrebato, es golpeado por Tulio y muere. Vemos que todos han tenido problemas en un momento dado. Todos han tenido que declarar sobre una acusación de supuesta culpabilidad y para conseguir la confesión, la policía los ha torturado.También, Asel, pero no es comparable la debilidad conseguida por medio de extorsión, con la villanía de Max que es fruto de la negociación con la policía, para obtener beneficios. Cuando los guardianes se quieren llevar a Asel, en los momentos finales del relato, y él sospecha para qué es e intenta huir, para no denunciar a sus colegas por debilidad y temor a la tortura, si viene al caso. No llega a escapar, pero se suicida para salvar, o no culpar a sus amigos Tomás y Lino, que son los que todavía quedan al final de la obra, que acaba de modo abierto sin conocerse sus destinos finales y con una puesta en escena igual que la del principio de la función.  

El espacio, el tiempo y la acción  

El espacio  es único, inventado, onírico con visos de estancia de lujo de la 'Fundación' que se hace real al descubrir que la realidad tangible es que están en una prisión y, por tanto, a pesar de las maquinaciones y elucubraciones imaginativas de Tomás, es un lugar con falta de libertad. La escena única de la representación tiene unos elementos que ayudan a comprender la visión de Tomas del espacio en el que se encuentra, ver su evolución y  entender la metáfora esperanzada que sugiere. Primero, la sala es acogedora, luminosa con confortables butacas y un ventanal que mira a un bello exterior; poco a poco van desapareciendo los complementos y se oscurece y se transforma en una celda con puerta de hierro y rejas, que lleva a un pasillo carcelario. Metáforas carcelarias, no sólo planteadas para una situación, concreta,  sino para la representación de la situación de la sociedad de ese momento.

La verdad es muy dura y fea, pero real, la mentira de la Fundación puede ser más bella momentáneamente pero solo es una manera visionaria de enfrentarse a la realidad de la que, inevitablemente, tendrán que salir. A pesar de que ocurre  de forma gradual, inevitablemente se cierra el espacio falseado, se apagan los colores, las luces; el impecable vestuario se convierte en sucio uniforme carcelario, los camareros son desaprensivos guardias carceleros, los sillones no son más que bancos mugrientos, no hay libros, no hay bebidas... Para Tomás esa es la metamorfosis, pero  el resto: Tulio, Max, Lino o Asel ya veían la realidad desde un principio y aún enfrentándose a las paranoias de Tomás, le sigue la corriente aconsejados por Asel, el más moderado y comprensivo de todos, que vela por su recuperación mental. Berta no está en un paraíso más que en la imaginación idealista y dubitativa de Tomás. En realidad, también está encarcelada. 

Ha pasado algo y la susodicha 'Fundación' los tiene retenidos hasta hacer un estudio de los hechos por los que se les tiene retenidos. Parece ser que se ha de hacer un juicio a causa de una experiencia médica fallida. Con la evolución del relato, se sabe que Tomás, Asel y Max han sido torturados. Max denuncia a alguien, a Tulio, que se lo llevan y lo ejecutan por la acusación que hace de él. Para el grupo, Max es sospechoso de ser un soplón. Le golpean para que hable. Llegan a la conclusión que es un confidente. Tomás también había sido un delator,  pero su caso es más tolerable por las torturas con las que le han maltratado para hacerle hablar. El remordimiento que siente Tomás le aleja de la realidad e inventa el entorno de la fundación como modo de supervivencia. Todos están condenados a muerte por repartir octavillas de denuncia de la situación, en defensa de los derechos sociales y por estar en contra de las atrocidades imperantes. Tomás ha sido un delator: Por su denuncia, unos compañeros han muerto y otros han sido arrestados; pero Asel comprende lo que ha hecho porque, sabe por experiencia, que frente a un terror insalvable y amenazas o realidad de torturas, la respuesta de la persona no es libre. Asel también oculta algo. Sabe que el compañero que está en la cama está muerto, pero si no lo dice, tendrán una ración de comida más para repartir, importante en la situación de escasez en la que viven. El comportamiento de Max es peor; engaña por obtener viles compensaciones personales; él no merece el perdón. La diferencia está en las limitaciones imposibles de superar, de las prebendas que no queremos perder porque nos protegen de una realidad hostil. Ser consciente de la limitación y superarla engrandece; es el camino que recorre Tomás, desde su idealizada habitación en la Fundación, hasta su tenebrosa celda en la cárcel. 

De forma reiterada, dudan de si lo que viven es verdad o ilusión; si es más real el espacio exterior, que el interior de la prisión que confunden con la Fundación. Asel habla del futuro de las prisiones; opina que serán mejores que las de ese momento, pero seguirán siendo lo mismo: Un lugar privado de la libertad, una prisión. A Asel le sacan de la celda en un momento que ya sabe cómo van las cosas; prevé que es para forzarle a hablar en contra de sus compañeros, otra vez; de los  que ahora quedan Tomás y Lino y, antes de denunciar a nadie, y con el fin de evitar tener un momento de debilidad, se tira por el balcón y muere. Lino se encara a un policía. Tomás se niega  a  actuar con violencia. Finalmente, hacen salir de la celda a Lino y a Tomás. Parece que el autor quiere hacer partícipe al público de su punto de vista. Mostrar que se está inmerso en unas estructuras que, mediante la opresión y el terror, se impide vivir en la verdad. La ficción puede parecer más hermosa, pero es falsa, y eso le hace perder toda su belleza; la realidad es triste y dolorosa, pero es cierta, y ahí radica todo su valor. 

El tiempo inscrito en la obra es discontinuo dentro de unos cuatro días; se relaciona con el tiempo simbólico transcurrido por medio de la evolución mental que siguen; hay como única advertencia del paso del tiempo, el cambios de trajes, de iluminación, de intensidad del color,  de decoración escenográfica,  etc., que pretenden mostrar la evolución del proceso mental que les permite acercarse, gradualmente, a la realidad en la que están inmersos. Aparentemente, las secuencias son:
  • Por la mañana, antes de comer 
  • Por tarde, después de comer
  • Tres días después tras la cena 
  • Pasado algún tiempo. 
El tiempo histórico de los hechos  contenidos es cercano a la de su escritura; se corresponde con la idea contenida presentada, a finales de 1975, después de la muerte de Franco. El autor sitúa la acción 'en un país desconocido', pero la obra se estrenó en Madrid, el año 1974, cuando todavía en España estaba vigente la pena de muerte, como se pudo comprobar tan sólo un año después. Esa situación tan horrible, aunque pudiera parecer inverosímil, no es tan extraña en nuestra historia. Hemos de recordar que en 1970 en diciembre, tenía lugar el juicio del Proceso de Burgos con un veredicto de pena de muerte a seis presos políticos de ETA y del FRAP que las protestas internacionales y la mediación del Vaticano evitaron, y pudieron conmutar por prisión. Era poco antes del estreno de la obra. La vigencia de la pena de muerte se alargó hasta muchos años después, en España. 

Retrocediendo más, podemos recordar que la pena de muerte en España estuvo vigente a lo largo de toda su historia hasta 1932 y abolida durante dos años en la Segunda República por una reforma del Código Penal. En octubre de 1934, se reinstauró para delitos de terrorismo y bandolerismo y, desde 1938, Franco la incorporaba al código penal. Permaneció durante treinta y ocho años porque consideraba que su abolición impedía un buen funcionamiento del Estado. Las últimas ejecuciones fueron el 27 de septiembre de 1975, dos meses antes de la muerte del dictador Francisco Franco. Fueron fusilados dos militantes de ETA, Jon Paredes y Anjel Otaegi y tres del FRAP, José Luis Sánchez Bravo, Ramón García Sanz y Humberto Baena, sin que esto supusiera una reducción de los atentados terroristas. Poco antes, el 2 de marzo de 1974 habían sido ejecutados con garrote Salvador Puig Antich en Barcelona y Heinz Chez en Tarragona. La ejecución de Heinz Chez (condenado por asesinato) el mismo día que Puig Antich fue un intento de las autoridades franquistas de confundir a la opinión pública y de intentar identificar la violencia común con la violencia por motivos políticos.

Los verdugos fueron Antonio López Guerra, de Badajoz, y José Monero Renomo, de Sevilla, que se habían presentado a las plazas de "ejecutores de sentencias" publicadas en el BOE del 7 de octubre de 1948.  

Salvador Puig Antich fue un anarquista catalán, juzgado y condenado por un tribunal militar como culpable de la muerte de un guardia civil. 

(...) llegó a la Modelo el verdugo, proveniente de Badajoz, en un coche de la policía (...) dentro de un maletín negro traía el garrote (...) Puig Antich esperó la llegada del indulto hasta el último momento (...) El director llega a la sala acondicionada para hacer las funciones de capilla y, dirigiéndose en Puig Antich, le dice: "Ha llegado el momento" (...) El breve trayecto que iba hasta el lugar donde el verdugo había preparado el garrote estaba lleno de policías sociales (...) En la última habitación de paquetes, que normalmente se usaba de almacén, clavada en el suelo con cemento, una viga de madera esperaba. Contra la viga, un banquillo sin respaldo (...) El verdugo le pone la anilla alrededor del cuello, mientras la habitación se va llenando: el cura de la prisión, el médico, los funcionarios, policías (...) El médico va tomando el pulso de Puig Antich hasta que decide que ha dejado de latir, y que ya puede certificar la defunción: "En Barcelona, a 2 de marzo de 1974 y siendo las nueve cuarenta horas, se extiende la presente diligencia para hacer constar que en la prisión de hombres de esta ciudad ha sido ejecutada por garrote la pena de muerte en la persona del reo Salvador Puig Antich" (...) Esta misma mañana, a las nueve y cuarto, en la prisión provincial de Tarragona daban garrote a Heinz Chez.  Carlota Tolosa (seudónimo de un colectivo de diez personas). "La torna de la torna", Editorial Empúries, 1985.

La Constitución de 1978 abolió la pena de muerte, salvo cuando se estableciera en tiempo de guerra. El Código Penal Militar preveía la pena de muerte como pena máxima para casos de traición, rebelión militar, espionaje, sabotaje o crímenes de guerra. Ya más cerca, en 1995,  una larga campaña de Amnistía Internacional y de la Comunidad de San Egidio, de diferentes organizaciones sociales e iniciativas, se abolió finalmente también la pena de muerte de la legislación militar con el acuerdo final de todos los partidos políticos. 

La acción de la historia tiene una morosidad semejante a la lentitud que supone la espera enigmática que tienen, el protagonista y los personajes de la obra; Tomás va pasando de la ficción en la que está sumergido a la realidad, con gran lentitud y ya en situación de ver y hablar con realismo, se activa y complica rápidamente el desenlace final. En principio, parece que la acción carece de peripecia en buena parte de la obra. Se trata. principalmente, de un drama de situación con elucubraciones mentales, aparentemente intrascendente, pero que permitirán recobrar la visión de realidad a Tomás. Elucubran sobre temas variados, unos personales  o de lo que imaginan que hacen: la cena, las bebidas, la librería con libros. Ahí se centran en la cultura que muestran poseer. Hojean las páginas de unos libros de arte en el que aparecen pinturas. Es al comienzo del Cuadro II. Parece que los comentan:

TOMÁS.— (Se ha inclinado para leer en el libro.) Aquí pone Gerard Terborch.
TULIO.— Un pintor está sentado y de espaldas, copiando a una muchacha coronada de laurel y con una trompeta. ¿Es ése?
TOMÁS.— ¡El mismo!
TULIO.— (Suspira.) Lo siento, pero no puedo dejar de intervenir. Ese cuadro es de Vermeer.  
Johannes Vermeer : El arte de la pintura (1666) Canvas Gallery Wrapped Giclee Wall Art Print (D6050)
ASEL.— (Ríe.) Todos estos holandeses son indiscernibles. La ventana, la cortina, la copa de vino, el mapa…
MAX.— Ha sido una confusión mental.
TOMÁS.— (Incrédulo.) ¿De los nombres? Además, yo sabía que este cuadro era de Vermeer… Vermeer de Delft. (Se inclina.) Aquí lo dice. ¡Gracias, Tulio! (TULIO lo mira de reojo y no responde.) ¿No quieres venir a ver? Es evidente que te gusta la pintura.
TULIO.- No tengo ganas de levantarme. 
Siguen hablando de otros pintores, Botticelli, El Greco, Rembrandt, Velázquez y  discutiendo sobre sus cosas.... Hologramas, acupuntura. Cada uno habla de lo que quiere defender en el ensimismamiento en el que están metidos. Toda la primera parte y el primer cuadro de la segunda, la acción se centra en el progresivo desmoronamiento del mundo inventado por Tomás y su sustitución por el real. El giro se produce con el descubrimiento del cadáver por los carceleros y la salida de Tulio para su ejecución. Otro nudo de la acción que toma fuerza en la segunda parte es la iniciativa de evasión por un complejo túnel. En esta segunda parte, la atención se desdobla, trasladando la tensión dramática al último cuadro.

Los dos puntos de acción, el descubrimiento del cadáver y el proyecto de huida, se entrecruzan y se yuxtaponen. Asel es el que señala y origina el desencadenante de ambas. Ocultar la muerte del Hombre fue idea de Asel, dice que  para  poder  aumentar la dieta de Tomás, con el fin de que mejorara su estado de salud e influyera en su recuperación. Consecuencia de ello, esperan ser llevados a celdas de castigo desde donde puedan hacer el túnel que les permitirá intentar la huida. También, se van desenmascarando las profesiones en las que se han etiquetado al principio y va descubriéndose la verdad que encierran.

Los temas destacados en la obra se relacionan con el ámbito político. 

Tenemos como tópico, que el hombre es un prisionero de sus entorno, como el ratón encerrado en una jaula. Los personajes elucubran sobre si se debaten contra la situación imperante o si pueden huir de la lucha. 

Se critica la violencia, que sólo genera violencia; ellos mismos son víctimas y verdugos  con tortura, hambre, crímenes. Lino ajusticia a Max con su justicia particular, lo que le  convierte en un criminal. 

Tenemos como motivo de la obra la oposición entre cordura y locura y sus límites. Una  u otra son capaces de dar una visión  de la realidad o su distorsión como defensa para evitarla. El simbolismo de los hologramas como representación de lo ausente -Tulio dice que se confunden con la realidad-. El ratón de Berta, Tomás; como el propio Tomás, esconde su propia realidad.

La locura de de Tomás, Asel y Tulio como posturas contrastadas. Asel señala que todos los presos mienten. Tulio dice que siempre han de decir la verdad. 

Si lo preferimos, podemos acercarnos a la obra dramática desde el audiolibro  que sigue,  en el que se tiene en cuenta las acotaciones propias de la obra y un relato agradable y que facilita la comprensión del texto. 

Adaptación televisiva de la obra

Contiene todas las características y sigue las acotaciones propuestas por el autor en el texto escrito. Participa un elenco de actores que, en aquel momento, año 1977 tenían reconocida una excelente capacidad interpretativa.  

La música 

La Pastoral de la Obertura de Guillermo Tell, de Rossini nos inscribe en el espacio del drama. Es un elemento significativo que nos lleva a la realidad contemplada por los protagonistas. La ‘Pastoral’ puede asociarse con el paisaje idílico que inventa Tomás, de La Fundación. Una situación misteriosa que nos rodea sin que la notemos. No basta con denunciar los males del presente, la música es la metáfora que crea imágenes positivas de un mundo con el que se sueña. Suena al comienzo, en un paisaje idealizado con la aspiración de paz y tranquilidad que el protagonista no puede llegar a conseguir en el presente. Se repite al final, cuando otros inquilinos van a ocupar la fundación. Sigue siendo un canto de esperanza. Los primeros no han conseguido su objetivo, pero puede alcanzarse algún día. De este modo, la obra no tiene una estructura cerrada, sino abierta.  

Desgraciadamente, en el mundo de hoy la tragedia de la que se habla en La Fundación no ha perdido ni un ápice de su vigencia en muchas partes del planeta, donde regímenes dictatoriales o estructuras de poder corruptas y represivas siguen manteniendo vivas las mismas injusticias sociales y políticas y los mismos dramas humanos que Buero Vallejo denuncia en esta obra, escrita hace ya casi cincuenta años.  

Sugerencias didácticas

I. Observar y comprender:  

  • Si antes no se ha tenido en cuenta, se recomienda conocer al autor, Antonio Buero Vallejo: su biografía y su obra literaria. 
  • Es importante hacer una aproximación al momento histórico. Siglo XX en España. El franquismo, los últimos años. ¿En qué época histórica se inscribe?  En un trabajo que puede ser un proyecto conjunto con la materia de historia, pueden verse las características y las consecuencias que tuvo.
  • La lectura de la obra de teatro puede ser de interés para jóvenes de Bachillerato o estudiantes jóvenes o adultos de español como Lengua Extranjera de un nivel avanzado, porque pueden entender a los personajes y valorar sus comportamientos.
  • La lectura de la obra literaria puede ser mejor comprendida si antes se han visto los resúmenes que se proponen, así como la versión de TVE que permitirán entender mejor los temas tratados en este dram filosófico: el comportamiento de los personajes y sus diferencias. 
  • El drama permite observar el marco histórico desde una la perspectiva crítica. Se pueden ver las dificultades a las que están sometidos los personajes.
  • La historia está explicada, ¿en 1ª, 2ª o 3ª persona gramatical? ¿Participa de la historia quién la narra o muestra lo que han vivido otros? ¿Quién da su punto de vista en el relato? ¿Hay un protagonista claro, y un antagonista o más? 
  • ¿Qué circunstancias rodean a Tomás? ¿Evoluciona con el paso del tiempo? ¿Cómo es y se comporta? ¿Su personalidad se va transformando? ¿Tiene una actuación honesta? ¿Qué otros personajes hay? ¿Qué valores o defectos se les puede adjudicar? ¿Qué papel tiene la mujer de la obra?
  • ¿En la película, tienen una buena caracterización cada uno de los personajes? 
  • ¿Cómo es y actúa Tomás? En qué detalles nos fijamos para calificar su carácter, sus virtudes y sus defectos. ¿Pueden enumerarse? ¿Qué relación tiene con los otros personajes? ¿Con todos tiene la misma relación? 
  • Destaca otros personajes secundarios ¿Qué rasgos pueden ser significativos a su carácter? ¿Cómo se le podrían describir de forma sintética? ¿En la película tienen una buena representación?
  • ¿Tienen valor las acotaciones de la obra escrita para la representación dramatizada? 

II Relacionar y reflexionar.

  • ¿Es realista el comienzo de la historia? 
  • ¿En la vida real, se producen circunstancias sociales y personales similares a las que se explican?
  • ¿Qué juicio merecen los personajes de la historia?
  • ¿Y el protagonista?
  • ¿El final es lógico, de acuerdo al desarrollo de los hechos?
  • ¿Qué papel tiene la mujer a lo largo del relato? ¿Qué valoración social merece?
  • ¿Qué valoración ética tiene la obra?
  • ¿Qué conclusiones generales se pueden extraer?      

III Aplicar.

La presentación de la obra servirá para motivar su visión y luego establecer un debate o fórum. Puede hacerse una breve alusión a:  

  • La dirección 
  • La interpretación
  • Los personajes
  • El espacio y el tiempo en que se presenta la ficción
  • La fotografía
  • La música.

Después de ver la película, pueden ser los espectadores quienes empiecen a opinar sobre lo que han visto.

  • Resumen de los elementos más importantes
  • ¿Qué es lo que más les ha impactado?
  • Importancia concedida a los aspectos estéticos: la imagen, la acción de los personajes.
  • ¿Qué papel juega la música en la película?
  • ¿Qué emociones suscita la historia?
  • ¿Qué valores se destacan?
  • ¿Qué se denuncia?
  • ¿Cómo se conectan a la película amor, humor y horror?
  • ¿Se presenta una situación lógica?
  • ¿Qué pretende mostrar la historia relatada?
  • ¿La historia es optimista o pesimista?

IV Actividades específicas

Estos elementos sugieren una serie de actividades didácticas que permiten una mejor interpretación del mensaje. Pero, para proponer actividades específicas, estableceremos una cierta ordenación del proceso.

  • Visión de la obra.
  • Interpretar el significado de algunas secuencias.
  • Identificar de la época histórica que se relata.
  • Identificar del lugar geográfico en que se desarrollan los hechos.
  • Evaluar de los elementos éticos de la historia.
  • Elementos de la historia que invitan al desarrollo de la imaginación y la creatividad. ¿El espacio?  ¿El tiempo? ¿La actuación de los personajes?
  • ¿Qué aspectos de la historia motivan a una actuación emotiva de los personajes?

Para saber más