domingo, 2 de febrero de 2020

LOS SANTOS INOCENTES DE MIGUEL DELIBES Y PELÍCULA DIRIGIDA POR MARIO CAMUS

Este año celebramos el décimo aniversario de la muerte de Miguel Delibes Setién y el centenario de su llegada al mundo. Nacido en Valladolid, el 17 de octubre de 1920​ y con deceso, allí también el 12 de marzo de 2010)​. Durante su larga vida, se le cruzó en la adolescencia, la guerra civil en la que, en 1938, con 18 años, se vio obligado a tomar partido y, como mal que consideraba menor, se alistaba en la la marina con las fuerzas sublevadas contra la Segunda República. Situación que no dejó de maldecir nunca, por la guerra fratricida que supuso  las heridas que ocasionó, de las que se sintió víctima a lo largo de su vida y que reiteró en sus escritos. 

El autor
Delibes fue, sobre todo, novelista. También, caricaturista, columnista y periodista; subdirector y director de ‘El Norte de Castilla’, diario que en 1958 dirigió hasta que dimitió por sus desavenencias con Fraga Iribarne, ministro de Franco de Información y Turismo. 

Delibes desarrolló a través del oficio periodístico una faceta de librepensador frente al Régimen franquista a favor de un plan de desarrollo de la región, una característica determinante de su pensamiento que lo condujo a abandonar la dirección de 'El Norte de Castilla' en 1966. Fue hombre apasionado del mundo rural y de la caza, que recogió en sus obras detalles de vida de los pueblos de Castilla. Es un magnífico representante de la literatura española de la posguerra. Fue reconocido por su obra como miembro de la Real Academia Española desde 1975 hasta su muerte. 
Miguel Delibes  www.elnortedecastilla.es
No vamos a hablar de su extensa obra, de la que podemos encontrar profusa información y detalles de cada una. Por la abundancia, tanto en cantidad como calidad, nos resulta difícil la selección, aún solo teniendo en cuenta  aquellas que han sido adaptadas al cine:

«El camino» (1950) Película de Ana Mariscal (1963) donde Daniel, que ha de dejar su pueblo para ir a estudiar a la ciudad evoca los recuerdos del lugar y de sus gentes. La adaptación de Ana Mariscal de la obra retrata la vida cotidiana de un pueblo castellano, con sus penalidades, problemas y mezquindades, también con sus alegrías y siempre con ternura hacia sus personajes, como hiciera Delibes en su novela. El caleidoscopio social que alberga muestra una realidad que su protagonista, Daniel el Mochuelo, considera que es la mejor posible, más que el incierto futuro de la ciudad a la que su padre le destina. El camino del progreso urbano no es el que desea un muchacho que lo tiene todo en el pueblo. El subjetivismo de Delibes es gran naturalidad y, en la película de representación sencilla, transmite la emoción de Daniel en su iniciático descubrimiento de la vida y la muerte. Sin ser fiel a la novela, ni al lenguaje rural de la obra, Mariscal recrea el universo idílico y fatalista contenido. Su humor satírico la hace más demoledora que la novela por la crítica social contenida, aunque sin juzgar a unos personajes que presenta con deferencia. 

«Mi idolatrado hijo Sisí» (1953) 'Retrato de familia' de Antonio Giménez-Rico (1976). Cecilio Rubes trata de permanecer neutral ante la inminente guerra civil. Poco a poco se nos muestra su presente y su pasado a través de su mujer Adela y de su amante Paulina. Retrata las pasiones familiares, amorosas, sexuales y políticas de unos personajes destrozados por la Guerra Civil Española (1936-1939).  

«El príncipe destronado» (1973) 'La guerra de papá' de Antonio Mercero (1977)La guerra civil de don Pablo es para sus hijos tan sólo "la guerra de papá". Su hijo Quico, de cuatro años, hace lo posible por llamar la atención de sus padres, ahora que ha nacido una nueva hermana. Es la historia de una familia acomodada desde la mirada de un niño de cuatro años, que acaba de ser “destronado” por su hermana de ocho meses. Trata temas cotidianos: la madre; el padre autoritario que no quiere olvidar la guerra en la que participó; tres hermanos mayores y uno de siete, que junto a Quico, el protagonista de la historia, idean trastadas. También, la criada... y el novio destinado como soldado a África, y los problemas diarios de todos.  

«Los santos inocentes» (1981) Película de Mario Camus (1984). Durante la década de los años sesenta, en pleno franquismo, una familia de campesinos vive miserablemente en un cortijo extremeño bajo el gobierno de un terrateniente. Su vida es renuncia, sacrificio y obediencia. Su destino está marcado, a no ser que algún acontecimiento imprevisto les permita romper sus cadenas. 

«El disputado voto del señor Cayo» (1978) Película de Antonio Giménez-Rico (1986)Transcurre entre uno un momento previo a las elecciones de 1977, presentado en color y otro, años más tarde, en blanco y negro. Víctor, militante socialista ha pasado buena parte del tardofranquismo encarcelado por sus protestas en contra del régimen. Es presentado por el partido en las elecciones de 1977 como candidato a diputado por la provincia de Burgos y ha de hacer campaña por pueblos pequeños. Le acompañan dos militantes jóvenes, Lali y Rafa.  Pronto descubren que también otros partidos quieren promocionarse entre los habitantes del entorno rural. Se encuentran con carteles de candidaturas rivales y propaganda ultraderechista. 

«El tesoro» (1985)  Película  de Antonio Mercero (1988) Un granjero descubre un tesoro celta enterrado en tierras de Castilla. Pronto acuden al lugar un arqueólogo llamado Jerónimo Otero y cuatro estudiantes. Una de ellos es Marga, una joven con la que Otero tiene una relación sentimental. La llegada de éstos creará un ambiente de desconfianza entre los habitantes del lugar.

«La sombra del ciprés es alargada» (1948) Película de Luis Alcoriza (1990)  Está basada en la primera novela de Miguel Delibes y galardonada con el premio Nadal, 1947. Un niño, Pedro, huérfano va a Ávila, al hogar de don Mateo Lesmes, que para educarlo le inculca la creencia de que para ser feliz hay que evitar la relación con el mundo, la emoción y el afecto. A pesar de esas funestas lecciones, vitalidad del chico le permite superar el pesimismo inculcado. Aunque los acontecimientos le obligan a recordar lo aprendido...   

«Las ratas» (1962) Película de Antonio Giménez-Rico (1997).  Presenta una visión trágica y dura de la Castilla rural a través con una galería de personajes que defienden rabiosamente su libertad. Destaca Nani, un niño sin más conocimientos que los que le proporciona la naturaleza; vive con su padre en una cueva. Viven de la caza de ratas de agua, único medio  posible de subsistencia que conocen. Cuando se les intenta privar de su techo y de su medio de vida, la violencia estalla incontenible. 

«Diario de un jubilado» (1995) Una pareja perfecta de Francesc Betriu  (1998)Es una comedia coral. Presenta la relación profesional y amistosa entre un cuarentón en paro forzoso y un viejo poeta homosexual que vive de rentas. De pronto, todo cambia por culpa de unas fotos comprometedoras, de un chapero encantador, un robo de joyas, un adolescente rubio, unos cupones de sopa de sobre, un premio Nobel que se hace el sueco, una hija demasiado emancipada, un amigo tristón y una parcelita en las afueras. Rafael Azcona adapta la novela "Diario de un jubilado". 

Los santos inocentes. La novela y la película
De entre todas las adaptaciones de sus obras, y con la dificultad que entraña una selección por la belleza y el interés del conjunto, elegimos 'Los santos inocentes' para tratar el film más a fondo, así como su relación con la novela, de la que Mario Camus hizo una adaptación de excelente calidad, aunque tenga alguna reducción de personajes. Es un relato corto, lo que facilita un buen acercamiento cinematográfico. El marco está situado en un cortijo extremeño, entre las provincias Cáceres y Badajoz.  

Muestra la relación entre los amos y la familia que les sirve.  Empieza con la llegada de la familia de terratenientes a la finca, donde el servicio debe atender sin fisuras a los amos, con momentos de verdadera perversión. Destacan, entre los personajes: El "señorito" Iván, un hombre malcriado acostumbrado a tener a los criados como esclavos a su servicio, con los que no tiene ninguna consideración. 
El señorito Iván
El encargado de la finca, Pedro el "Périto" que supervisa las tareas del cortijo; es máximo responsable de lo que allí ocurra y también bastante déspota con sus subordinados. Pedro está casado con Pura que, a su vez, es amante del señorito Iván, matiz que todo el mundo conoce, pero nadie menciona y el marido no tiene en cuenta, a pesar de la repulsión que le produce, porque de esta permisividad depende su puesto de trabajo, ya que su relación con el "señorito" es de vil dependencia, sin poder protestar las desmesuras del jefe. 
Pedro el Périto y su mujer Pura
Asimismo, capitales para el desarrollo de la historia son Paco el Bajo y su esposa, la Régula. Paco siempre acompaña al "señorito" en las batidas de caza. Es un experto oteador que facilita la contabilidad de las piezas cobradas por Iván y le permite exhibir sus habilidades con la escopeta. 
Paco el Bajo
Junto a estos personajes, destaca Azarías, hermano de Régula, conocedor de animales y plantas del entorno y con una relación con ellas muy especial, pero con una minusvalía que le hace tener una conducta instintiva e ingenua, dotada de gran ternura. 
Azarías
También tenemos otros personajes secundarios con escasa representación; son los hijos de Paco y Régula: Nieves y Quirce que quieren saber poco del campo y tienen una actitud más displicente que la de los padres ante los terratenientes; la Niña Chica, que está en un estado de inconsciencia durante parte del relato, el médico, el obispo, etc. Es un retablo completo de los distintos estamentos que componen ese mundo en el que los ricos tienen un poder total sobre la servidumbre, que tiene como bien propio y maltrata, física y psicológicamente porque el sumiso siervo no tiene más opción.   
Quirce, Nieves, Régula con la Niña Chica en los brazos, Paco y Azarías. (De izquierda a derecha )
La llegada de la señora marquesa y de su familia, supone un inicio del desarrollo del relato. Todos los sirvientes han de rendir pleitesía a los que se consideran sus benefactores. Se han de poner en marcha para que, durante su estancia, todo funciones a la perfección. Pedro el "Périto" quiere demostrar su capacidad y eficacia en el manejo del servicio, por lo que exige que las actuaciones de todos adquieran gran ritmo. En estas circunstancias, un día, el "señorito" reclama la presencia de Paco para acompañarle, como de costumbre, a una cacería. Durante la jornada, Paco sube a lo alto de una rama, en la copa de un árbol para con un palomo ciego como cebo, pueda atraer a las presas, con tan mala suerte que cae al suelo desde lo alto y se rompe el fémur. Este giro del relato hace que se manifieste con toda su crudeza la pésima situación social en la que vive el servicio,  porque se patentiza lo poco que significan sus vidas para los amos y lo esclavizados que están. No seguimos con el argumento: se trata de una obra de muy pocas páginas, que se lee fácilmente, la representación de las secuencias que siguen pueden verse además, en la película y son de gran impacto emocional, por lo que, vale la pena  que no se desvelen los sucesos antes de tiempo. Como conclusión, cabe decir que el señorito es y representa el cacique con el peor de los significados; terrateniente con un sentido de la autoridad muy discutible porque se cree con derecho de propiedad de lugares y personas, de forma totalmente arbitraria e inaceptable. Esta base servirá para construir el argumento y presentar la radiografía de una España  rural, latifundista, gris y bárbara de los años 50-60.

La estructura de la obra tiene seis partes subdivididas en tres momentos: 
  • Presentación de los personajes con sus características  y situación social que representan.  
  • Desarrollo del argumento con la llegada de los personajes que activan la acción.
  • Climax que precipita el final de la historia. 
Acercarse a la obra es como oír una conversación informal donde no existen los diálogos guionizados, sino entradas y salidas de escuchas donde se entremezclan la narración, la descripción y el diálogo sin previo aviso. Con un lenguaje coloquial aparentemente sencillo, pero que requiere de la sabiduría dialectal y el conocimiento específico de la flora y la fauna del lugar. 

Delibes enfrenta  en 'Los santos inocentes' dos mundos paralelos en los que es difícil que las personas puedan encontrarse aunque vivan juntas, porque se desconocen e ignoran: el de la vida rural en la que se respeta y conoce la lógica de la naturaleza de forma intuitiva y la ceguera urbana ante todo lo natural que se asocia con la cultura urbana que, como contrapartida, tienen un rol social más elevado.  

Aunque no todos los personajes están en uno u otro estatus de forma encasillada. La novela de 'Los santos inocentes' gradúa estas actitudes en los personajes: Quirce, el hijo de Paco, de origen rural, se muestra distante en sus actuaciones ante los suyos, porque se resiste a aceptar su pobreza de siervo y actúa con displicencia ante sus amos. Pedro, el Périto, también rural, está de mediador, es de una clase inferior a sus amos, aunque superior a los siervos porque tiene ciertos poderes sobre y, por una parte, es menospreciado por Iván, el personaje urbano de una clase superior; aunque abuse de la docilidad de Régula y Paco que están por debajo de él y decide, sin preguntar, sobre el destino su hija, Nieves, que tiene aspiraciones distintas a las de quedarse en la casa sirviendo, pero no puede protestar. En medio, o como sin haberse contaminado todavía, por la juventud está, Miriam, la hija de la Marquesa, que no entiende cómo  sus criados pueden vivir en esa  situación extrema. Por debajo de todos están Régula y Paco que exclusivamente viven para el servicio que realizan, sin contar para nada ni sus deseos, ni sus necesidades; Azarías en una situación que sólo conecta con la naturaleza y con los afectos, aparentemente inconsciente pero que tiene claro lo que es recto y justo y las injusticias. Por debajo de toda situación de normalidad está la Niña Chica, paralizada, inconsciente  y que, de vez en cuando da unos aullidos como único síntoma de vida. 
Los santos inocentes. 1ª Edición Seix y Barral (1984)
La obra plantea la injusticia social que supone la vida que llevan los sirvientes en la casa de los caciques en la que sirven. Son campesinos que acatan todo lo que les mandan sin ningún viso de compasión. Los dueños de la tierra se aprovechan de su incultura y buena fe, son explotados por un sistema socioeconómico basado en el latifundismo extremo, explotador y egoísta. En este núcleo central tan evidente, aparecen subtemas dignos de tenerse en cuenta como es el amor de la naturaleza por parte de Paco, capaz de conocer los datos más sutiles para conseguir una caza excelente, por el olor, por la observación visual, etc., y sobre todo de Azarías con su empatía por los animales que entiende y le comprenden, aunque sus capacidades como persona pudieran parecer limitadas. Azarías tiene una ternura igual para arropar y cuidar  a su milana, el búho o la graja, que para calmar el llanto de la niña chica.  La situación injusta en la que viven hace que se produzca una rebelión trágica como reacción inevitable, instintiva. Se trata de una venganza individual. Se comete un crimen, como una seria respuesta a un maltrato continuado.  No desvelamos el final para que tenga el interés que merece todo el desarrollo de los hechos.  

La novela fue publicada el año 1981. 'Los santos inocentes' es la última obra de la trilogía rural de Delibes con 'El camino' (1950) y 'Las ratas' (1962). En las tres hay unos factores comunes: la inocencia del personaje central, aquí protagonizada por Azarías, que muestra el amor de Delibes hacia la vida del campo y la caza. Pronto se convirtió en un texto imprescindible, que Mario Camus llevó al cine en 1984. 



La interpretación hecha de los personajes hicieron brillar la obra con luz propia, Alfredo Landa como Paco, Terele Pávez como Régula, Juan Diego como Iván, Paco Rabal representando un inmenso Azarías, Ágata Lys como Pura y Agustín González como Pedro el Périto,  entre los principales y con un guion que es una magnífica adaptación de la novela homónima de Miguel Delibes. Esta película logró una de las cimas indiscutibles del cine español, comparable a los mejores logros de Buñuel, Berlanga o Ferreri. A ello contribuyó no poco un elenco de actores y actrices de primera clase,  a la impresionante denuncia de la miseria física y moral del campesinado español y, con uno de los grandes aciertos, su indefinición histórica: podría estar ambientada en los cincuenta, en los sesenta, en los setenta o esta misma mañana.  

Mario Camus (segundo por la izquierda) con los actores (desde la izquierda) Terele Pávez, Juan Diego, Alfredo Landa y Paco Rabal en el festival de Cine de Cannes en 1984, con la presentación de ‘Los santos inocentes’

Santander (1935/04/20 - 2021/09/18). Muere Mario Camus, a los 86 años el cronista infatigable de la España de siempre, el mejor adaptador de textos literarios que ha visto el cine español y un cineasta afanado en buscar la invisibilidad. Era un hombre a contracorriente. Formado en la mítica Escuela Oficial de Cine de Madrid y, en consecuencia, precursor del Nuevo Cine Español junto a gente como Carlos Saura, Basilio Martín Patino o José Luis Borau. 
Su cinematografía atiende no solo al relato o a la historia, sino al drama que habita entre los cuerpos, en los huecos como en ‘La colmena’, que ganó el Oso de Oro en el festival de cine de Berlín de 1983, y ‘Los santos inocentes’, que con la que Paco Rabal y Alfredo Landa ganaron el premio de interpretación del festival de Cannes de 1984, fueron dos de sus grandes títulos y le catapultaron a la fama internacional, pero serían sólo dos ejemplos de la especial capacidad que el director  tuvo para adaptar grandes textos a la pantalla. Y eso fue así, en las obras más personales que poblaron los años 90 y que van desde sus primeras lecturas profundas y heridas del terrorismo en 'Sombras en una batalla' (1993) y 'La playa de los galgos' (2002) hasta sus trabajos más torturados que quieren ser también una mirada oscura de un tiempo, el nuestro, cada vez más gris. Y aquí, 'Después del sueño' (1992), 'Adosados' (1996) o 'El color de las nubes' (1998).  

Mario Camus al cumplirse más de 30 años del estreno de 'La colmena', comenta la atemporalidad de la trama. dijo:"El señorito de hoy no está en el cortijo, sino en el banco. Esa misma subordinación, humillación, sometimiento, los tenemos nosotros hoy”... “Cuando me planteo por qué sigue ahí, pienso en la sensación que tuve al leer la novela de Miguel Delibes, el terrible comportamiento de las personas, unas con otras, y esa especie de esclavitud consentida” (Juan Silvestre, ‘Fotogramas’26/04/2019). Palabras que no han perdido su vigencia, cuando ya han pasado casi cuarenta años de los hechos que se relatan en la novela, recreados en la película. Con otros modos y sutilezas, pero de finalidad y consecuencias parecidas: Sigue habiendo "santos inocentes". 

Puede verse la película 'Los santos inocentes', completa en FlixOlé

Sugerencias didácticas.

La lectura de la novela nos ofrece posibilidades de análisis que luego pueden contrastarse con la visión de la película: 
  • ¿Qué personajes participan en la obra? Citar sus nombres, puedes señalarlos de acuerdo con su mayor o menor importancia en el relato.
  • ¿Qué juicio merecen los personajes de la historia? Con sus nombres, señalar lo que caracteriza a cada uno. ¿El final es lógico de acuerdo al desarrollo de los hechos? ¿Qué conclusiones generales se pueden extraer? 
  • ¿A qué nombre se refiere el hipocorístico Paco? ¿Qué perfil tiene? Cómo es. Cómo piensa. Qué hace. Valora su actitud éticamente.
  • El señorito Iván ¿que papel tiene en el relato?  Señalar sus valores éticos o sus defectos. 
  • ¿Cómo es Azarías? Describe su físico y sus características. 
  • El vocabulario de la obra es muy asequible, pero muchas palabras tienen escaso uso actual.  Se puede hacer un recorrido, viendo su representación visual o buscando su significado. 
  • También puede interesar el valor de las frases hechas que aparecen. 
Se trata de una obra que tiene muchos valores simbólicos que hemos señalado  y que tienen gran importancia para comprender el enorme valor de una obra de pocas páginas, de fácil lectura y mucha capacidad por establecer paralelismos entre el mundo  del campo que presenta  y que se puede trasponer. 

La presentación de la película servirá para hacerse una breve alusión a la novela:
  • El director (Puede buscarse su información) ¿Se ha visto alguna de sus películas?
  • Los personajes y su representación actoral
  • El espacio y el tiempo en que se presenta la ficción
  • La fotografía
  • La música
Después de ver la película, pueden ser los espectadores quienes empiecen a opinar sobre lo que han visto.
  • Resumen de los elementos más importantes.
  • ¿Qué es lo que más les ha impactado?
  • Importancia concedida a los aspectos estéticos: la imagen, la acción de los personajes.
  • ¿Qué papel juega la música en la película?
  • ¿Qué emociones suscita la historia?
  • ¿Qué valores se destacan?
  • ¿Qué se denuncia?
  • ¿Cómo se conectan a la película amor, humor y horror?
  • ¿Se presenta una situación lógica?
  • ¿Qué pretende mostrar la historia relatada?
  • ¿La historia es optimista o pesimista? 
Actividades específicas

Estos elementos sugieren una serie de actividades didácticas que permiten una mejor interpretación del mensaje. Pero para proponerlas, estableceremos una cierta ordenación del proceso.
  • Visión de la película.
  • Interpretación del significado de algunas secuencias de la película.
  • Identificación de la época histórica que se relata.
  • Identificación del lugar geográfico en que se desarrollan los hechos.
  • Evaluación de los elementos éticos de la historia.
  • Elementos de la historia que invitan al desarrollo de la imaginación y la creatividad. ¿El espacio?  ¿El tiempo? ¿La actuación de los personajes?
  • ¿Qué aspectos de la historia inspiran una actuación emotiva de los personajes?
Para saber más